Lavrov también subrayó que la nación eslava apoya el cese al fuego “permanente” en territorio gazatí, así como una liberación de los palestinos que se encuentran privados de libertad.

Durante la reunión del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para analizar la situación en Oriente Medio, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov denunció el envío de armamento por parte de los Estados Unidos (EE.UU.) a Israel y Ucrania.

Esto, evidentemente hace al país norteamericano cómplice directamente del genocidio perpetrado por las fuerzas israelíes en la Franja de Gaza y en la Cisjordania ocupada.

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De igual forma, la postura de Rusia cuenta con un respaldo por parte de la ONU, pues constantemente ese organismo internacional ha solicitado un corte de los flujos armamentísticos para así lograr un cese del conflicto.

Coincidiendo con la visión de la ONU, Lavrov asegura que en cuanto finalice la ayuda en materia de armas a de Washington a Tel Aviv, el derramamiento de sangre cesará.

“Sin embargo, Estados Unidos no quiere o no puede hacerlo. Al parecer, lo importante no es salvar vidas humanas, sino las maniobras que les permitan sumar más puntos en la campaña electoral”, ha aclarado el alto diplomático eslavo.

Bajo esta postura, Lavrov también subrayó que la nación eslava apoya el cese al fuego “permanente” en territorio gazatí, así como una liberación de los palestinos que se encuentran privados de libertad.

“Esperamos que cuando esto suceda, se crearán las condiciones para la reanudación de las negociaciones sobre la implementación de la decisión de las Naciones Unidas sobre el establecimiento de un Estado palestino de coexistencia pacífica y seguridad con Israel”, resaltó.

Todo este empeño del Gobierno ruso por un fin del genocidio ocurre a casi 10 meses del inicio del genocidio de las fuerzas de Israel contra la Franja de Gaza y la Cisjordania ocupada.

Los constantes bombardeos han dejado una cifra de muertos que ya suma más de 38.700, aunque no representa con exactitud el número de víctimas, pues las autoridades sanitarias gazatíes apuntan a un sinnúmero de víctimas bajo los escombros.

Asimismo, el Ministerio de Salud de la Franja de Gaza subraya que de la cifra de 38.794 muertos, la mayoría son mujeres y niños; y otros 89.364 han resultado heridos.

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